La fascinante historia de Moët & Chandon
Un patrimonio que se remonta a más de 270 años.
la historia de Moët & Chandon comenzó en 1743 cuando Claude Moët fundó la casa de champagne. Bajo su liderazgo, la casa experimentó un crecimiento meteórico y rápidamente se convirtió en una referencia en términos de champagne, apreciado por las cortes reales europeas, en particular por el rey Luis XV. Su nieto, Jean-Rémy Moët, jugó un papel decisivo en la reputación internacional de la casa al introducir sus champagnes en la corte de Napoleón Bonaparte, que se convirtió en un ferviente admirador. Fue bajo la dirección de Jean-Rémy que la casa realmente despegó exportando a nivel internacional, lo que permitió a Moët & Chandon convertirse en uno de los principales productores de champagne a escala mundial.
En 1832, la casa se fusionó con la del hijo de Jean-Rémy, Pierre-Gabriel Chandon, dando origen a la marca. Moët & Chandon tal como lo conocemos hoy. El espíritu de innovación y conquista del mercado global siguió dando frutos a lo largo de los siglos XIX y XX. A principios del siglo XXI, Moët & Chandon se unió al grupo LVMH, líder mundial en lujo, consolidándose aún más como casa de referencia en el mundo del lujo. champagne.
hoy la casa Moët & Chandon sigue siendo una figura destacada en el champagne, que encarna tanto la grandeza histórica como la audaz modernidad. Cada añada producida por la casa perpetúa el saber hacer adquirido a lo largo de los siglos, buscando constantemente innovar y adaptarse a las expectativas de los consumidores contemporáneos. Este matrimonio entre tradición e innovación convierte a Moët & Chandon en un actor clave en el mundo de la champagne.
El terruño de Moët & Chandon
Parcelas únicas para champagnes incomparables
Moët & Chandon tiene uno de los viñedos más grandes de la región Champagne, con una extensión de más de 1.300 hectáreas, repartidas en los mejores terroirs de la región. Estas parcelas están ubicadas en las tres principales zonas de producción de Champagne: la Montaña de Reims, el Valle del Marne y la Côte des Blancs. Esta diversidad geográfica permite a la casa cultivar las tres principales variedades de uva de Champagne: Pinot Noir, Pinot Meunier y Chardonnay en condiciones ideales, garantizando así una amplia paleta aromática en sus añadas.
la tierra de Moët & Chandon se caracteriza por suelos calcáreos típicos de la región, que juegan un papel crucial en la maduración de las uvas y la mineralidad de los vinos. El pinot noir, plantado principalmente en la Montaña de Reims, aporta estructura e intensidad a los champagnes, mientras que el pinot meunier del Valle de la Marne contribuye a su frutosidad y redondez. Chardonnay, procedente de la Côte des Blancs, aporta frescura, finura y elegancia, características emblemáticas de los champagnes Moët & Chandon.
La casa se esfuerza por practicar una viticultura sostenible y responsable, favoreciendo métodos respetuosos con el medio ambiente. Moët & Chandon lleva varios años apostando por un enfoque de viticultura sostenible, limitando el uso de productos químicos y promoviendo la biodiversidad. La vendimia es manual, para garantizar una rigurosa selección de los racimos, y cada parcela se trabaja de forma que se optimice la expresión del terroir.
El secreto de los vinos Moët & Chandon
Un saber hacer incomparable
Elaboración de vino en Moët & Chandon se basa en una experiencia de más de dos siglos y medio, que combina innovación y respeto por las tradiciones de Champagne. Cada paso del proceso, desde la cosecha hasta el embotellado, se controla cuidadosamente para garantizar una calidad constante, añada tras añada. La casa utiliza el método tradicional del Champagne, con una fermentación en tinas seguida de una segunda fermentación en botella. Esta última etapa, denominada “espuma”, es crucial para obtener la finura de las burbujas que caracterizan a los champagnes Moët & Chandon.
Las añadas sin añada, como Moët Impérial, son el resultado de una mezcla compleja de vinos de reserva, que garantiza consistencia en sabor y calidad. Por otro lado, las añadas, como la Grand Vintage, sólo se elaboran en años considerados excepcionales. Cada añada captura la esencia del año y el terroir, ofreciendo una experiencia única en cada degustación.
Envejecimiento de champagnes Moët & Chandon Se elabora sobre lías durante varios años, lo que confiere a los vinos una textura cremosa y profundidad aromática. Los aromas característicos de los champagnes de la casa incluyen notas de fruta blanca, cítricos, flores blancas, con toques de brioche y minerales. La tipicidad de los champagnes Moët & Chandon reside en su perfecto equilibrio entre frescura, elegancia y complejidad. Ya sea para una gran celebración o un momento de degustación íntimo, cada botella de Moët & Chandon promete una experiencia sensorial única, marcada por la finura de las burbujas y la riqueza de los aromas.
Compra uno champagne Moët & Chandon, es regalarse un pedazo de historia y excelencia, una promesa de refinamiento y placer, todo ello de la mano de uno de los nombres más prestigiosos del mundo del vino.