Château d'Yquem

El ícono de Sauternes

Una verdadera leyenda del viñedo de Burdeos, el Château d'Yquem ha dominado la denominación Sauternes durante varios siglos y por sí solo encarna la cima de los vinos dulces. Clasificado Premier Cru Supérieur en 1855, Yquem debe su reputación a un terruño excepcional, un clima único y un saber hacer de un rigor incomparable.

Situada en una meseta con suelos variados, que mezclan arcilla, arena y grava, la finca se extiende sobre 113 hectáreas en el corazón de una finca de más de 200 hectáreas y goza de unas condiciones ideales para el desarrollo de Botritis cinerea, podredumbre noble. Las brumas matinales, resultantes del encuentro entre el Garona y el Ciron, favorecen esta concentración natural de la uva, dando origen a una materia prima de rara intensidad.

Más que un vino, Yquem es una experiencia, un símbolo de perfección y emoción, buscado por los amantes del vino de todo el mundo.

Una cosecha excepcional, fruto de una naturaleza generosa

Añada 2022

el Château d'Yquem 2022 destaca por su notable equilibrio entre frescor e intensidad. Su color dorado brillante anuncia un bouquet complejo donde se mezclan frutas exóticas, flores blancas y notas melosas. Elaborado a partir de una rigurosa selección de uvas botritizadas, este vino ofrece una experiencia gustativa de una finura poco común. Durante siglos, Château d'Yquem encarna la excelencia de Burdeos y la quintaesencia del vino dulce. Esta finca legendaria, ahora propiedad del grupo LVMH, perpetúa una tradición de innovación y calidad incomparable en el corazón del viñedo de Sauternes.

2022 estuvo marcado por calor extremo y sequía, lo que resultó en una de las cosechas más concentradas en la historia de Yquem.

Inolvidable

Château d'Yquem 2021

Bordeaux

1.116,00€ IVA INCLUIDO

186,00€ / unidad

Descubra

el Château d'Yquem, auténtica joya de la denominación Sauternes, encarna desde hace siglos la excelencia de los grandes vinos dulces. Su elaboración se basa en una maestría ancestral, combinando precisión técnica y profundo respeto por la tierra. Cada añada nace de una sucesión de gestos minuciosos: un prensado delicado, luego una larga crianza de 24 a 26 meses en barricas de roble francés, todas nuevas, rigurosamente seleccionadas para revelar la riqueza aromática del vino.

La rareza es parte integral de la firma de Yquem: incluso en los años más favorables, cada cepa solo entrega una copa de este precioso néctar. Dotado de una opulencia característica, una notable complejidad y una incomparable longitud en boca, Yquem se puede disfrutar desde su juventud. Conservado en condiciones óptimas, revela a lo largo de décadas matices de excepcional profundidad que atestiguan su legendaria longevidad.