Couvent des Jacobins

Más información
Vinos Couvent des Jacobins

El icónico

No se encontró ningún producto

Usa menos filtros o elimínalos todos

Historia de la finca Couvent des Jacobins

la historia de Couvent des Jacobins

Un terruño precioso

Las características únicas del terruño de Saint-Émilion

El Convento de los Jacobinos se beneficia de un terruño excepcional, caracterizado por suelos calcáreos y arcillosos-calcáreos, típicos de la denominación de origen Saint-Émilion. Este terroir único ofrece condiciones ideales para el cultivo de las variedades de uva emblemáticas de la región, principalmente Merlot, que constituye la mayoría de las variedades de uva, pero también Cabernet Franc. Los suelos bien drenados permiten que las vides extraigan los nutrientes necesarios de las profundidades, lo que da como resultado vinos de gran riqueza y complejidad. La propia denominación de origen Saint-Émilion es sinónimo de excelencia, con vinos conocidos por su elegancia, estructura y capacidad de envejecer. El Convento de los Jacobinos se enorgullece de producir vinos que respondan a estas características. En cuanto al método de agricultura, la finca favorece un enfoque sostenible, respetuoso con el medio ambiente. Las vides se cultivan sin el uso de herbicidas químicos y se fomenta la biodiversidad en las parcelas, con el fin de preservar el equilibrio natural del viñedo. El riguroso manejo del viñedo y la atención prestada a cada detalle garantizan la calidad de la uva recolectada. Cada parcela se trabaja según sus especificidades, y la vendimia se realiza a mano, con una cuidadosa selección de la uva, para conservar sólo los racimos más sanos y maduros. Este cuidado en el cultivo de la viña es uno de los elementos clave que hacen famosos a los vinos del Couvent des Jacobins.

La producción de grandes vinos

Métodos tradicionales para vinos extraordinarios

En el Convento de los Jacobinos, la elaboración del vino es un arte que combina tradición y modernidad. Tras la vendimia manual, las uvas se clasifican cuidadosamente antes de ser vinificadas en cubas con temperatura controlada. Este preciso control de la temperatura permite controlar la fermentación y extraer aromas y taninos de forma óptima. El proceso de elaboración del vino se realiza con una mínima intervención, con el fin de preservar la expresión natural del terroir y de las variedades de uva. Posteriormente los vinos se envejecen en barricas de roble francés durante un período de 12 a 15 meses, dependiendo de la añada. Este método aporta estructura y complejidad a los vinos, respetando su frescura y frutosidad. Las barricas son cuidadosamente seleccionadas por su calidad y su capacidad para potenciar los aromas de los vinos sin dominarlos. Esta atención prestada a cada etapa de la elaboración garantiza vinos de gran finura, con un potencial de envejecimiento excepcional. Los vinos del Convento de los Jacobinos se distinguen por su equilibrio entre potencia y elegancia. Merlot, presente principalmente en las mezclas, aporta aromas de frutas negras maduras y ciruela, mientras que Cabernet Franc añade notas de grosella negra, violeta y especias. En boca, los vinos son generosos y refinados, con una hermosa longitud y frescura características del gran Saint-Émilion. Se prestan tanto para una degustación inmediata como para un almacenamiento prolongado en bodega. Comprar un vino del Convento de los Jacobinos significa disfrutar de una parte de la historia y de la tradición, al mismo tiempo que se degusta un vino de gran calidad, que refleja la excelencia del terroir de Saint-Émilion y el saber hacer único de sus viticultores.